LA GRAN ESTAFA

La tramoya cubana para el 1° de mayo viene preparándose varias semanas atrás, hoy ya tienen el teatro listo para la función mundial. Nombre de la Obra “Todo un pueblo unido en protesta por la campaña mediática contra Cuba” la obra se trata de una historia mal contada.

Hoy leo un post de Yoani Sánchez “La Brevedad de las Consignas” y percibo en ella cierto desencanto, me identifico Yoani, yo también me siento de igual forma al ver las imágenes de miles de personas marchando hacia la plaza de la revolución. Mi sentir tiene que ver con esa gran masa que paralizada por el miedo se deja acarrear con banderitas en mano. Volvemos a la misma rutina de mandarle por elevación un mensaje al mundo: “miren lo unido que está este pueblo a la revolución” así que no apuesten por el minúsculo grupo de opositores.

No digo que todos los que marcharon este primero de mayo eran detractores de la revolución castrista, ellos tienen algunos seguidores, corrompidos y purulentos, pero muy necesarios para el régimen, y estoy más que segura que de tener la opción de elegir sin las terribles consecuencias -que todo cubano conoce- del gobierno y de sus purulentos, más de la mitad de los que estuvieron hoy en la plaza de la revolución se hubieran quedado en sus casas. Todo cubano, los de adentro y los de afuera, sabemos cómo se consigue esa gran muchedumbre que nada tiene de espontaneidad, por cierto. “En los centros laborales todos tuvieron que poner por escrito su compromiso de asistir, de no ausentarse a la cita “con la Patria”. Muchos estudiantes de pre universitario y tecnológico durmieron ayer en las escuelas para ser llevados –muy temprano– a la Plaza de la Revolución, pues nada podía quedar al azar en esta congregación por el día de los trabajadores. Curiosamente, no se vieron pancartas pidiendo mejorías salariales o criticando las radicales reducciones de personal que se suceden por estos días.” Dice Yoani en su nota sobre este día del trabajador en Cuba. Tantos años que llevo fuera de Cuba y veo –por lo que cuenta Yoani- que se sigue utilizando la vieja táctica de presión y de las guaguas (buses) mandadas a provincia para llenarlas con cubanos del interior que deben sumarse a la plaza sí o...sí.

El país pasa por la crisis más estrepitosa de su historia, la falta de liquidez está llevando a la isla a la quiebra total; hay un evidente desabastecimiento de alimentos de primera necesidad hasta en las tiendas con pago en divisa extranjera, ni hablar de las carencias en los hospitales y en la distribución de medicamentos. El Estado prohíbe la empresa privada para los cubanos, entonces el Estado es quien debe proveer de puestos de trabajo al pueblo, pero resulta que el Estado tampoco tiene como mover las industrias y las empresas que aporten a la economía, situación que ha arrojado a la calle a una gran masa de trabajadores resposables de elevar por las nubes el índice de desempleo, indicador que no se publica, pero que te lo puedes imaginar con solo una vueltecita por los barrios de La Habana. Ahora el gobierno acaba de eliminar el subsidio al desempleo que cubría el 60% del salario en pesos cubanos que como moneda nada vale. El trabajador cubano recibe mísero salario y está en total desamparo pues ni siquiera puede contar con el sindicato, la CTC (Central de Trabajadores de Cuba) es un órgano del Comité Central del Partido que finge ser el organismo defensor del trabajador.

Con todo este panorama en cualquier país democrático del mundo, los trabajadores, hoy 1° de mayo, estarían protestando y exigiendo sus demandas. Pero en Cuba, es todo lo contrario, marchan alegres y contentos a sostener el mismo sistema que los ahoga, a darle el espaldarazo a la revolución. ¿Hasta cuándo esta historia tan mal contada?¡Por favor dejen ya de estafar al mundo con estas farsas de pacotilla!